Guerra :
La guerra es la forma de conflicto socio-político más grave entre dos o más grupos humanos. Es quizá una de las más antiguas de todas las relaciones internacionales, aunque se convierte en un fenómeno particular con el comienzo de las civilizaciones. Supone el enfrentamiento organizado de grupos humanos armados, con el propósito de controlar recursos naturales o humanos, o el desarme, sometimiento y, en su caso, destrucción del enemigo, y se producen por múltiples causas, entre las que suelen estar el mantenimiento o el cambio de relaciones de poder, dirimir disputas económicas y/ó territoriales.
GUERRAS NACIONALES E
INTERNACIONALES

Lo
más chocante, quizá, de los últimos años ha sido el escaso impacto que han
tenido las guerras que estallaron en los años noventa del siglo XX en los
Balcanes sobre las relaciones internacionales a gran escala, especialmente en
Europa. Se habló mucho a comienzos de 1990 de la vuelta al enfrentamiento entre
Rusia y el Occidente, o entre católicos y ortodoxos, o de un deterioro de las
relaciones entre las dos potencias regionales involucradas más directamente, por
motivos históricos o de afinidad, Grecia y Turquía. Pero de alguna manera, y sin
que los participantes siempre llamaran la atención sobre ello, los Estados más
importantes que se vieron involucrados estuvieron enormemente contenidos: Grecia
y Turquía no se excedieron en sus reacciones, ni permitieron que su opinión
pública o sus fuerzas nacionalistas influyeran en su política; Rusia hizo algo
de ruido por Serbia y realizó un intento teatral de reclamar Kosovo para sí, en
1999, al tomar el aeropuerto de Pristina antes de que llegaran allí las fuerzas
de la OTAN, pero finalmente quedó en nada. Comparado con las cuestiones de la
expansión de la OTAN, el asunto de los Balcanes afectó poco a las relaciones
entre Rusia y Occidente en los años noventa.


Durante la última década de la Guerra Fría, por ejemplo, la guerra en Nicaragua estaba unida a los conflictos paralelos en Guatemala y El Salvador, produciendo lo que algunos interpretaron como una "guerra civil centro americana". El triunfo de los sandinistas en Nicaragua en 1979 también sirvió --por su proximidad a Estados Unidos, y el aparente espaldarazo por parte de Cuba-- para estimular la campaña de la derecha a favor de una mayor fuerza militar y del fin de la distensión, lo cual llevó a Ronald Reagan al poder en 1980. También en la década de los años ochenta el conflicto de Afganistán tuvo importantes repercusiones internacionales: las fuerzas soviéticas entraron directamente en el país en 1979 y hubo operaciones de envergadura, aunque no declaradas, de Estados Unidos, Pakistán, Irán y China.
Además
del impacto regional, que empeoró las relaciones entre Irán y Pakistán,
Afganistán también se convirtió en una cuestión de primera magnitud durante la
Guerra Fría. Un década antes, la guerra de Vietnam se había visto acompañada de
guerras en Laos y Camboya, y de levantamientos en Tailandia, creando así un
conflicto que afectó a toda Indochina. También en la década de 1980, la región
del sur de África fue una zona de guerras y
enfrentamientos
entrelazados,
desde Mozambique y Zimbabwe en la vertiente del océano Índico, hasta Namibia y
Angola en la costa atlántica.

Los
nacionalistas árabes y los políticos islamistas tienen una tendencia a echar la
culpa de todo a los israelís y a la negativa de éstos a reconocer los derechos
de los palestinos, mientras los israelís aseguran que todo esto es una excusa.
La verdad se encuentra en algún término medio entre unos y otros: la existencia
de Israel o su política no son de ninguna manera la causa del carácter social y
económico de los Estados árabes, productores de petróleo, ni lo fueron tampoco
del estallido y el curso de la guerra entre Irán e Irak de 1980-1988, ni de la
guerra civil argelina de los años noventa ni del conflicto entre turcos y
kurdos.
Sin
embargo, la política de Israel ha sido un factor de gran relevancia en la
política interior de sus países vecinos, especialmente Líbano, Siria y Egipto, y
durante décadas, desde 1948, ha desempeñado un papel en la estimulación y
radicalización del nacionalismo árabe y el islamismo en toda la región. La
victoria de Hamas en las recientes elecciones palestinas promete tener una
repercusión, sin duda, más que local o estrictamente árabe-israelí. Dada su
inspiración en el movimiento panárabe de los Hermanos Musulmanes --que se fundó
en la década de 1920-- y sus fuertes redes en Egipto, Sudán, y Siria, Hamas se
sentirá parte de una tendencia regional más amplia, y así recibirá el apoyo de
los países árabes que no aceptan a Israel, especialmente Siria e Irán. Es muy
poco probable que llegue a un compromiso de paz con Israel en el futuro cercano,
o que permita que le obliguen a la sumisión por medio de un bloqueo de ayuda y
alimentos a Gaza y Cisjordania.
Con
las recientes elecciones en Palestina, aparentemente se ha puesto fin a todo un
proceso de maniobras políticas y negociaciones árabe-israelí, lleno de defectos
e interrupciones, pero que lleva en marcha desde finales de los años sesenta. Y
Egipto --durante largo tiempo el ansioso patrocinador de los palestinos-- dejará
de ser el poder diplomático predominante en Palestina, y le sustituirán Siria e
Irán. Esto, a su vez, confirmará la creciente influencia de
Irán,
evidente
ya en el resto de la región, especialmente en Líbano, donde su protegido
Hezbollah ha llegado ahora al gobierno, y en Irak, donde Irán está tomando
silenciosamente las riendas en cuestiones políticas y de seguridad en el país.
La
propia guerra de Iraq tiene, sin lugar a dudas, un alcance que va más allá de lo
interno o lo local. Es lo contrario de los conflictos aislados del tipo del de
los Bancales o el de Chipre. En gran medida lo es porque Estados Unidos, al
intervenir en marzo de 2003, lo convirtió en un símbolo tanto de su credibilidad
como gran potencia mundial como por su intención de fomentar la democracia y
llevar a cabo un "cambio de régimen" en Oriente Próximo. Tres años después de
esa intervención, se ha hecho obvio lo mal que han ido las cosas. Lejos de ser
una fuente de estabilidad y cambio democrático en la región, Iraq se ha
convertido en caldo de cultivo de la resistencia, con --según los cálculos de
Estados Unidos-- más de ciento veinte grupos armados diferentes en activo, e
imán que atrae a jóvenes militantes islamistas de todo Oriente Próximo y más
allá, que quieren tomar parte en sus batallas.

me gusta tu informacion se parece mucha a la que yo publique
ResponderEliminaresta muy bien me gusta porque esta muy clara y esta entendible y nos habla de las guerras que ya han pasado y todo lo que ha surgido despues de eso
ya que huvieron muchas guerras
Eliminaralgunos ganaron y otros perdieron...
ES MUY EXTENSA LA INFORMACIÓN Y LO EXPLICA MUY DETALLADA LAS GUERRAS QUE YA PASARON
ResponderEliminarya que huvieron muchas guerras...
Eliminarmuy buena información
ResponderEliminarya que hablas de las diferentes guerras que hubieron y muy bien explicado cada ejemplo
gracias
ResponderEliminarya que tienen como proposito controlar recursos naturales o humanos